Cuando tú hablas de miedo
nosotros hablamos de cultura.
Postres, bailes y sonrisas de oriente son una delicia.
Cuando tú no hablas de inversión en armas
nosotros hablamos de terrorismo de estado.
Es un secreto a voces que tu negocio es regido por la codicia.
Cuando tú hablas de fronteras
nosotros hablamos de barbaries.
Jhalal ha sido increpado a fuerza de pistola en su cabeza, robado y agredido a la voz de “Por esto trabajo aquí, para impedir que putos inmigrantes como tú entren en mi país”
Cuando tú hablas de capacidad
nosotros hablamos de engaño.
Tú nación tiene capacidad de sobra para acoger a personas que se encuentran en peligro de muerte.
Cuando tú hablas de libertad
nosotros hablamos de represión.
Ashraf lleva desaparecido unos días, ha sido encarcelado mientras paseaba por no disponer del papel que le convierte en un ser “legal”.
Cuando tú hablas de números
nosotros hablamos de humanidad.
Dos niños con parálisis cerebral duermen a calle abierta.
Cuando tú hablas de ilegalidad
nosotros hablamos de personas,
cuando tú hablas de nación
nosotros hablamos de ilegalidad,
… y así nunca nos vamos a entender.
¿Qué le desearías a tu hijo, a tus padres, a tu hermano, a tu amigo?